¿Dónde Su Belleza Otoñal?
Ayer los duendes del amor, el hada
buena, miraban nuestros amoríos
con bendiciones en la madrugada,
bajo el sol, en los páramos sombríos.
Hoy confusos, distante en la nada,
anhelos vi morir de escalofríos.
murieron en tu boca enamorada
besos que otrora fueron besos míos.
Condenados a pena capital,
mis sueños de pasión, mis sueños presos,
como heridos de pérfido puñal:
Dos clavos introducen en mis sesos:
¿Quién disfruta su belleza otoñal?
¿Y en labios de quien estarán sus besos?